¿Sabías que hay ciertas conductas que incentivan más el trabajo en equipo? Y ¿Sabías que, aunque tengas a los mejores jugadores de cada posición, tu equipo no funcionará si no se presentan estas conductas?
Michael Jordan, quien es considerado como el mejor jugador de basketball de todos los tiempos, y un extraordinario líder de equipo, dice que “El talento gana partidos, pero el trabajo en equipo y la inteligencia ganan campeonatos”.
Todos los equipos que han tenido resultados excepcionales, cuentan con jugadores que poseen grandes aptitudes colaborativas. Los miembros de los equipos altamente exitosos fomentan la colaboración, lo cual los lleva a obtener mejores resultados. Por otro lado, también es cierto que hay personas muy talentosas que de manera individual tienen resultados extraordinarios, pero que, cuando trabajan en equipo no logran explotar su máximo potencial y ahí está la importancia de saber trabajar colaborativamente.
A lo largo de la historia se han desarrollado muchas teorías sobre la conducta humana dentro de un equipo de trabajo. Una de las más famosas es la Teoría FIRO. FIRO, se traduce como Orientación Fundamental de Relaciones Interpersonales.
Cuando estalló la guerra de Corea en 1950, EUA le pidió al Dr. Schutz que hiciera una investigación sobre cómo mejorar el rendimiento de los equipos de batalla. Antes de eso, el ejército estadounidense pensaba que la forma de conseguir el mejor equipo de batalla era incorporar a las personas más competentes para cada puesto, ponerlas juntas y entonces se tendría al mejor equipo.
Descubrió que así no se incentiva correctamente la dinámica entre los miembros de un equipo, muy al contrario, cuando todos los integrantes de un equipo saben que son los mejores en lo que hacen, cada uno toma una actitud individualista, quieren “brillar” y actúan de manera aislada sin consultar a su equipo.
El gran descubrimiento del Dr. Schutz es que la dinámica entre los miembros de un equipo de trabajo era mucho más importante que el talento individual de cada uno ellos.
Después de muchas pruebas descubrió las conductas que tienen un impacto mayor en la compatibilidad entre las personas y descubrió que eran 3 conductas primarias: la Inclusión, el control y la apertura.
- La inclusión tiene que ver con el grado en que una persona se siente importante para los demás
- El control tiene que ver con el grado en que una persona se siente competente y el grado en que considera qué tan competentes son las otras personas de su equipo.
- Y la apertura tiene que ver con el grado en que una persona siente que le agrada a los demás y el grado en el que está abierto a aceptar de manera agradable a las otras personas.
Cuando no nos sentimos importantes, competentes y agradables para otros es natural que se generen miedos. Lo que la Teoría FIRO nos dice, que cada persona tiene ciertas preferencias respecto a estas 3 conductas cuando se relaciona con otros. Es la combinación de nuestras creencias sobre la propia importancia, competencia y simpatía, combinada con los miedos de ser ignorado, humillado o rechazado, lo que realmente tiene un gran impacto en cómo nos relacionamos con otras personas.
¿Qué pasa si tienes en tu equipo muchas personas que tienen un bajo nivel de inclusión y entonces no les importa relacionarse entre ellos? Si una persona tiene baja autoestima acerca de su propia importancia y miedo indebido a ser ignorado, su conducta también se puede volver rígida respecto a la inclusión y su conducta podría ser que quieran incluir a personas demasiado o muy poco y entonces no responden adecuadamente a las circunstancias.
Estas tres conductas afectan profundamente la dinámica y el éxito de nuestros equipos, por lo que es importante conocer cómo manejarnos en estos tres niveles.
Las empresas son un juego en equipo, tal como dice el proverbio africano: “Si quieres ir rápido, camina solo. Si quieres llegar lejos, ve acompañado”. Es muy importante que en nuestro equipo de trabajo exista una cultura colaborativa. Este tipo de culturas tienen un enorme impacto en la estabilidad emocional de las personas y convierte al lugar de trabajo en una excelente plataforma para liberar su talento y potencial. Esto se traduce en excelentes resultados en ventas, utilidades y crecimiento para tu empresa.
